UNIÓN VASCA
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Unión Vasca convoca el 20 de Abril a las 19.30 hs a la asamblea general ordinaria. Orden del día:
Sergio Amundarain, Secretario.
Juan Manuel Lopetegui, Presidente.
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La lengua es el símbolo de identificación del pueblo vasco. Su aprendizaje y difusión es fundamental para mantenerla viva. Unión Vasca cuenta con cuatro cursos que iniciarán durante el mes marzo.
Seguirán las mismas profesoras que el año pasado, y a los tres grupos del 2017 se le sumará uno nuevo para los estudiantes que quieren comenzar de cero. Los niveles de los cursos serán: uno inicial, dos intermedios A1 de euskera munduan y uno de nivel A1 avanzando. Las clases iniciarán en las siguientes fechas: Grupo de Nora nivel inicial: Lunes 19 a 21 hs. Comienza 19 de marzo. Grupo de Nora Nivel intermedio: Martes de 19 a 21 hs. Comienza 13 de marzo. Grupo de Titina Nivel avanzado: Miércoles de 19 a 21 hs. Comienza 14 de marzo. Grupo de Ainara Nivel intermedio: Jueves de 19 a 21 hs. Comienza el 22 de marzo. Para incripciones o información enviar un mail a [email protected] Una de las actividades con más convocatoria de la casa sin duda es la danza. Los viernes Unión Vasca se llena de niños, jóvenes, familiares y amigos porque es el día de ensayo. Este 16 de marzo, se iniciarán las clases para todo aquel que quiera practicar esta disciplina. Será un año muy especial debido a que en agosto el cuerpo de baile celebrará su 70 aniversario. La danza vasca es una combinación de ritmos y sonidos que de sólo escucharla dan ganas de ponerse a bailar. El "Beti Aurrera" (Siempre Adelante) de la ciudad de Bahía Blanca fue fundado el 15 de agosto de 1948 y cuenta con grupos divididos en edades para que todos puedan participar. A los encuentros y presentaciones en nuestra ciudad y en diversos lugares se suma éste año la particularidad que se cumplen 70 años y se celerbrará a lo grande el fin de semana del 18 y 19 de agosto. El festejo incluirá invitados de otros centros vascos y una presentación en el teatro Municipal. Los ensayos comienzan éste viernes 16 de marzo en el primer piso de la Unión Vasca.
TXIKI TXIKIAK - niñas y niños hasta los 5 años- : de 18 a 19 hs (a cargo de Rosario Malanga e Irune Lopetegui del Santo) TXIKIAK - niñas y niños de 6 a 11 años- : de 19 a 20 hs (a cargo de Edurne Gil Irazusta y Amale Irazusta). MEDIANOS - adolescentes de 12 a 15 años- de 20 a 21:30 hs (a cargo de Amparo Fernandez y Francisco Malanga). MAYORES - a partir de 15 años en adelante- de 21:30 a 23:30 hs ( a cargo de Arantxa Gil Irazusta e Iara Barraza). ADULTOS- este grupo está destinado a todo aquel que quiera aprender pasos básicos de danza. No se requiere conocimiento previo, es muy relajado y divertido. Asisten papás de los txikis, ex dantzaris, estudiantes de euskera tíos y abuelos. Se reúnen los viernes a las 19 hs. (a cargo de Julia Sosa) (La actividad no tiene ningún costo adicional sólo hay que hacerse socio de la institución solicitando la ficha de inscripción en secretaría de lunes a viernes de 17 a 21 hs) La biblioteca “Barandiaran” es un espacio abierto y creativo que año a año suma más actividades para los socios. Los txikis son los invitados especiales de Cecilia Jauli quien les prepara dinámicas lúdicas y didácticas en marco de la cultura vasca. El 2017 culminó cargado de actividades donde los más pequeños de la casa participaron del “Proyecto Pictionary” mediante el cual se confeccionaron una serie de láminas que contenían palabras en euskera acompañadas del respectivo dibujo ilustrativo. Estas láminas se imprimieron y fueron colocadas en una cartelera para que todos los chicos pudieran verlas. Partiendo de las láminas antes mencionadas, se realizaron, en un tamaño más pequeño, una serie de tarjetas que utilizaron los txikis para jugar. Las mismas fueron impresas y recortadas a tal fin. A partir de este juego no solo se divirtieron y representaron las imágenes en dibujos, sino que además de fueron incorporando palabras en euskera. Otra de las actividades que más gustó a los txikis fue la denominada “Dibujos Alocados”. En rectángulos de cartulina se colocaron las palabras escritas en euskera correspondientes a los elementos contenidos en la cartelera.
El juego consistía en que cada niño tomara al azar tres o cuatro palabras, las buscara en la cartelera para determinar su significado y confeccionara un dibujo que resultara de la combinación de los objetos que las palabras escogidas denotaran. Para 2018, Cecilia pretende trabajar con las efemérides, donde se conversará sobre las fechas alegóricas, para luego hacer dibujos de las mismas. Las producciones de los chicos serán expuestas en una cartelera a la vista de todos los socios de Unión Vasca. Muchas veces escuchamos las historias de la existencia de un ¨matriarcado vasco¨. Hipótesis que relacionan la vida y carácter de la mujer vasca con la cultura milenaria. El filósofo Andrés Ortiz Osés sostuvo que el arquetipo de la gran madre vasca Mari, instauró un rol protagónico de la mujer como figura de poder que se diferencia del resto de los países de Europa. Investigadores como Teresa del Valle que han dedicado su carrera al estudio de la mujer vasca desmienten esta creencia arraigada en la cultura popular. Dentro de la antropología, afirma Del Valle, se nota la ausencia de estudios que se refieran específicamente a la participación de la mujer en la sociedad y cultura vasca. Sin embargo, en los que existen, se recalca la importancia de la mujer, e incluso, en algunos de ellos, se hace referencia a una posición de igualdad respecto al hombre. Se llega a afirmar que, comparando las mujeres vascas con las de otras sociedades agrícolas de Europa, se advierte que las primeras tienen una posición más prestigiosa en la comunidad. La antropologa sostiene que muchas de las características que se resaltan de la mujer de Euskal Herria en estas interpretaciones se relacionan con la primacía de los estudios de la cultura rural sobre otros aspectos de la historia vasca. Por esa razón, las hipótesis de la existencia de un matriarcado realzan la importancia de la mujer dentro de la unidad socio-económica del caserío; su participación en los ritos de paso, especialmente en los de la muerte. Otras corrientes aluden la supremacía de las mujeres vascas a las interpretaciones de la importancia de los personajes femeninos en la mitología. Algunos de los autores más conocidos son Barandiaran y, más tarde, el filósofo Andres Ortiza de Oses, quien llega hasta afirmar, basándose principalmente en el análisis de la mitología, la existencia «de una estructura matriarcal vasca», que se encuentra en conflicto con influencias posteriores de tipo patriarcal racionalista e individualista. La investigadora guipuzcoana sostiene que desde una visión general de la antropología vasca se constata que a la mujer ha sido interpretada principalmente a través de la mitología, de las prácticas de brujería, en su rol de madre y principalmente dentro del marco de la cultura agrícola y resalta la necesidad de relevar otros ámbitos como la costa o la ciudad, cuestionar la constante asociación de la mujer con la esfera privada, e investigar sus posibles aportaciones a la esfera pública o las causas de su ausencia. Dentro del caserío la mujer tuvo y sigue teniendo una participación bastante igualitaria en el trabajo aportando directamente a la economía doméstica a través de la venta de los productos (huevos, hortalizas, fruta) y ejerciendo cierto poder decisorio en lo referente a la socialización de los hijos, y en asuntos que el hombre llevaba a la esfera pública. Pero esto no es suficiente para afirmar que la mujer vasca tiene una posición predominante en la sociedad rural, y menos, el utilizar estos datos para hacerlos extensivos a otros ámbitos y generalizar sobre la mujer de Euskal Herria. Del Valle afirma que no basta enumerar todos los aspectos de la vida en los que la mujer participa, o las veces que ésta aparece como protagonista en relatos mitológicos, sino que es preciso ver todo esto en un contexto mucho más amplio.
Esto se refiere, por ejemplo, al ejercicio de los derechos y obligaciones de los dos sexos y también a la valoración social que estas obligaciones y derechos tienen en la sociedad vasca, siendo un buen punto de referencia lo que éstas representan de poder decisorio y en las esferas donde se ejerzan. Es así, donde se espera analizar las causas y manifestaciones de la discrepancia que constatamos muchas mujeres entre la idealización del poder femenino en la sociedad y cultura vasca, y la vivencia diaria de movernos dentro de esquemas de poder masculino; la sujeción a roles establecidos tradicionalmente; el acceso limitado a la esfera pública y el desequilibrio de oportunidades laborales, por citar algunas manifestaciones de esta discrepancia. ¨Investigamos la realidad de las mujeres en aquel momento en la costa, en el medio urbano y en el medio rural. Hablar de matriarcado nos llevaba a hablar de la capacidad decisoria de la mujer, de poder, y compararlo con el de los hombres, también en los ámbitos donde se llevaban a cabo esas decisiones. Y vimos que el matriarcado vasco se refería a una ideología acerca de un poder que no se correspondía con el real de las mujeres en aquellos momentos, y también con lo que las mujeres iban descubriendo como poder, que era incidir también más allá del ámbito doméstico.¨ afirmó Del Valle. Al reflexionar sobre las relaciones de género de hoy entre vascos y vascas la investigadora sostuvo ¨En la actualidad todavía domina una separación de lo que pertenece a la mujer y lo que pertenece al hombre, aunque los cambios están presentes. Yo diría que todavía es una sociedad en la que los espacios físicos están muy marcados; también muchas actividades y formas de expresión. Por ejemplo, el mundo de la expresión emocional está mucho más vinculado a la mujer. Todavía nos sentimos orgullosos de que el vasco apenas exprese sus emociones. Eso forma parte de esa diferenciación.¨ Derribar mitos ayuda a construir relaciones que busquen modificar la realidad a fin de construir una sociedad mejor. Pretendemos abandonar los ideales ficticios por valores que promuevan la igualdad entre los seres humanos, el respeto por las necesidades de las personas y la equidad. El pequeño barrio de Oma, en Kortezubi (Bizkaia), encierra un territorio singular conocido como el Bosque Animado. Es una obra creada en 1984 por el escultor y pintor bilbaíno Agustín Ibarrola que apunta a construir una nueva relación entre naturaleza y arte. El artista dejó huellas en árboles y piedras, con el propósito de unir el trabajo de los ancestros del Paleolítico con la tendencia moderna del land art, una corriente que trabaja directamente sobre el entorno natural, siendo el propio paisaje el lienzo del pintor. Al inicio del recorrido, parece una representación un poco caótica porque se ven formas y colores si sentido, pero cada detalle tiene su lógica y su razón de ser. Para observar la obra como es debido y en su conjunto, se colocaron unas flechas amarillas que indican donde debes colocarte exactamente. La mayoría de las figuras se reparten entre diferentes árboles, situados en distintos planos de profundidad. Así, Ibarrola, al cubrir de colores y de vida cientos de pinos, compuso un inmenso lienzo que cada visitante puede recomponer jugando con la perspectiva mientras camina. Sin duda es una obra muy original y diferente a la cual se le añade un bello paseo por la naturaleza entre pinos, robles y castaños. Muy cerca del “Bosque de Oma” se encuentran las Cuevas de Santimamiñe, declaradas en 2009 por la UNESCO como patrimonio de la humanidad, forma parte del patrimonio histórico de Bizkaia.
Las pinturas rupestres datan de hace 13.000 años. Las galerías interiores contienen diversas formaciones kársticas pero con el fin de cuidar y mantener el espacio ya no se permite el acceso al público . |
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August 2020
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